Puedes ser mi padre o mi madre, que me disteis la vida.
Puedes ser mi hermano, con quien mas la he compartido.
Quizas seas mi tio, mi tia, mi abuelo o mi abuela, quizas mi primo o mi prima... con quien tan buenos ratos he pasado.
Incluso puede que seas mi hija...
Todos tenemos la misma sangre, somos de la misma familia, y todos teneis un hueco especial en mi corazon.
Pero no debemos quedarnos ahi, pues la sangre es fuerte pero el cariño lo es mas. Y aunque sea algo mas etereo y, puede que, volatil, es increiblemente mas poderoso.
La familia siempre estara ahi, en su hueco especial.
La familia tiene la ventaja de que tiene el minimo garantizado. Pero el minimo no tiene porque ser suficiente.
No te estanques, no pienses que por ser familia tienes asegurado un trato especial.
Hace años que no nos vemos, ni siquiera me has llamado... acaso solo porque compartamos la misma sangre te crees mas importante que la gente que realmente si comparte mi vida?
Tienes la puerta abierta, y seras bien recibido, eso te lo prometo, pero el resto dependera de nosotros, de los dos.
Porque la sangre que no circula pierde la vida.
1 comentario:
estoy de acuerdo... "incondicional" no significa que se pueda abusar, y se abusa tanto por omisión...
Publicar un comentario