jueves, 7 de junio de 2007

Mundo singular

Que paren el mundo o me bajo en marcha.

No se si me estare haciendo mayor, o es que cada dia se agraba mas mi alergia a las gilipolleces, pero es que hay que escuchar cada estupidez...

De muestra un par de las que me ha tocado soportar esta semana, pero que no son las unicas.

Un Cybercafe debe pagar una indemnizacion a los padres de uno de sus clientes, el cual murio tras dos dias seguidos jugando. (el LINK)
Si pagas indemnizacion es porque produces un mal, es decir debemos suponer que los "pobres" padres sufren por la perdida de su hijo... entonces por que cojones le dejan tirarse dos dias enteros fuera de casa jugando en un cybercafe?!!!
Vale que ya les vale a los huevazos del cybercafe... pero es que lo de los padres tiene delito.
Los padres son los primeros responsables de la educacion de los hijos, los padres!!

Y otra que no tiene desperdicio.
El Steaua prohibe la musica de Queen en el estadio porque Mercury era Gay.
O_O
Lo flipo.
Esta claro que escuchar musica interpretada por un gay te debe volver gay, y como ser gay es una desviacion o una enfermedad, pues claro, hay que proteger al populacho... evidentemente.
Atencion a esta perla de sabiduria:
"Desde ahora en adelante mandaré que se escuche en Ghencea [el estadio del club] música religiosa, y no satánica. Yo pago y pongo la música que quiero. ¡Que aquel homosexual no cante más la melodía sobre la destrucción!" ha manifestado. En este sentido, ha argumentado que la música religiosa inspira paz y amistad, y que así no habrá más accidentes y lesiones de los jugadores.
We will rock you es una melodia sobre la destruccion. Una cancion satanica.
Madre mia, se me ponen los pelos como escarpias, y yo que creia que estabamos en el sXXI.

Eso si, la musica religiosa inspira la paz y la amistad... como no sean las letras?
Pero vamos, la musica pop, y especialmente las canciones de los hippies esas si que son un llamamiento a la paz y a la amistad. Aunque claro, este es capaz de tildarlas de sacrilegas e incitadoras de la lujuria.

Como dijo el sabio:
"Tanto gilipollas y tan pocas balas".

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